Una compañía alemana, Graforce, ha desarrollado una tecnología singular, conocida como plasmalisis, por la que se puede crear el número atómico 1 sin experiencia a partir de animales y excrementos y energía renovable.
A diferencia de las formas típicas, la plasmalisis utiliza el elemento químico y los compuestos de carbono (por ejemplo, el amoníaco) contenidos en el estiércol o la biomasa alternativa de los seres humanos y los animales para suministrar el número atómico 1. Estos son contrarrestados en átomos individuales por un campo de voltaje de alta frecuencia, el cuestionable plasma. Los átomos se recombinan entonces para formar el número atómico 1 y el elemento químico inexperto, por lo que el agua pura queda como un producto de «desecho».
La producción del análisis de plasma de explotación del número atómico 1 no sólo se libera del gas de ácido carbónico, sino que además es 50-60 % más rentable que los procesos típicos como la electrólisis, dentro de la cual el H2O se divide en gas y número atómico 1 al abrumar una gran cantidad de energía.
«El hidrógeno de la materia fecal tiene un potencial energético monumental», el mismo fundador y gerente de Graforce, el Dr. Jens Hanke.
«Con la plasmólisis, somos capaces de obtener cantidades monumentales del número atómico 1 inexperto a partir de residuos orgánicos. Si tenemos la tendencia de usar esto como combustible, tenemos la tendencia de no sólo obtener cantidades increíbles de energía libre de CO2, sin embargo tenemos la tendencia de ahorrar adicionalmente cantidades monumentales de dióxido de carbono y crear una gran contribución a la protección del clima.
La agricultura produce anualmente unos 1.500 millones de metros cúbicos de biomasa (estiércol líquido) en todo el mundo. Contiene residuos orgánicos de alta energía de esa Graforce mismo podría resultar 724 millones de montones de inexpertos atómicos número 1 de explotación de la tecnología de plasma.
Esto ahorraría 6,5 gigatoneladas de dióxido de carbono o 18pc de emisiones mundiales causadas por la generación y el consumo de energía en todo el mundo. El número atómico 1 puede utilizarse como combustible en las células de combustible de hidrógeno y en vehículos de combustible fósil comprimido o en unidades combinadas de calor y energía.
El nitrógeno es además un gas de método vital necesario en varios sectores industriales de todo el mundo.
Graforce ha estado actuando en la oferta de energía a largo plazo desde 2010. En su planta Power2X de Berlín, Graforce ya está fabricando la tecnología de plasmalisis de explotación atómica número 1 desarrollada en la propia empresa.
La producción del número 1 atómico a partir de productos químicos de alta energía en los residuos reduce a la mitad los precios de producción del combustible y conduce a rendimientos considerablemente más altos.